La tecnología aplicada en el comercio mayorista y minorista
Por Yulie Lozada*
Sin duda, los acontecimientos de esta naciente década han reestructurado la manera en la que el mundo funciona. El confinamiento y los efectos de la pandemia modificaron la conducta de los consumidores y también de las propias industrias.
Transformación
En este contexto, la tecnología juega un papel crucial en el comercio mayorista y minorista, en donde la automatización y modernización de los procesos son clave en la transformación a mediano plazo de esta industria, principalmente por las demandas de un nuevo orden comercial.
Los tres puntos esenciales de la cadena de suministro atraviesan una evolución trascendental, donde la fabricación, la distribución y el punto de venta final estarán controlados en gran medida por la tecnología.
Por ejemplo, en Reino Unido, el país que encabeza esta tendencia, se estima que una tercera parte de su cadena retail estará en dicha transformación para el año 2030.
Grandes retos dentro del sector retail
En esta nueva era es primordial considerar el comportamiento del consumidor. La más reciente encuesta Consumer Pulse de McKinsey nos deja ver que aunque se han adoptado nuevos comportamientos, también se regresó a las viejas costumbres porque las personas volvieron a sus actividades diarias y visitan nuevamente los puntos de venta.
Sin embargo, si nos enfocamos en una escala mayor, el gran reto será sanear la interrupción continua de la cadena de suministros, que según se advierte, se recuperará lentamente.
Predicción
El Retail Tech Report de Deloitte destaca que la tecnología tendrá un protagonismo clave, pues se necesitarán herramientas de predicción que alerten a la organización de una cadena de suministros sobre una posible interrupción y, al mismo tiempo, se usarán modelos digitales que brindarán la posibilidad de una reacción ante tal situación.
Por otra parte, la tecnología también será fundamental en la detección de tendencias dentro de un mercado en particular, ya que los consumidores ansían probar cosas nuevas y diferentes.
La innovación y la originalidad aportarán valor a las marcas, cuyas capacidades de producción deberán responder de forma eficiente.
Maximizar la inversión tecnológica
El rol de la tecnología en el desarrollo económico de la industria incrementó su relevancia en los últimos dos años. Hoy es un aliado que permite generar crecimiento comercial, y tanto los mayoristas como los minoristas deben aprovecharla como una nueva oportunidad de negocio que los mantendrá vigentes dentro de un mercado que está cambiando rápida y constantemente.
Valor
En el estudio The Tech Transformation Imperative in Retail, llama la atención que parte de la aceleración tecnológica que experimenta la industria se orienta a tecnología enfocada en ofrecer valor comercial; es decir, hay que dejar de gastar en software de generaciones pasadas y focalizar los esfuerzos de inversión en tecnologías de punta, e incluso, en proyectos piloto de nuevos modelos comerciales.
Este enfoque, destaca el reporte, duplica las habilidades internas para obtener soluciones competitivas y, además, optimiza los costos de producción hasta en un 20%.
¿Cómo beneficia la transformación tecnológica a los consumidores?
Después del confinamiento, el regreso a las actividades normales generó un modelo híbrido en donde las personas consumen a través del comercio electrónico, pero también mantienen sus viejas rutinas, como ir a una tienda física (McKinsey).
Por esa razón, la revolución tecnológica en el buscará impulsar a los negocios no solo en la automatización de sus procesos, también en enriquecer la experiencia de los consumidores, ya sea digital o físicamente.
Digitalización
En ese sentido, Retail Tech Report destaca que gracias a la digitalización los minoristas brindarán a los clientes conveniencia y conexión.
La conveniencia se enfoca en presentar el producto correcto en el momento preciso con motores de recomendación inteligentes y con medidas de seguridad confiables, mientras que la conexión implica ofrecer soporte profesional con asistentes virtuales, motores UGC, chatbots, entre otros.
La experiencia será más satisfacción para generar fidelidad, la razón es que las presiones inflacionarias actuales y las constantes subidas de precios han provocado que el usuario final busque valor agregado en sus productos, si no lo encuentra, es la razón principal para cambiar de marca (McKinsey).
*Yulie Lozada es subdirectora de comunicación Corporativa de Intelisis